Estreno en España: 4 Diciembre 2009
Puntuación:
Sinopsis
“In the loop” arranca cuando el Presidente de los Estados Unidos y el Primer Ministro británico deciden iniciar una guerra. Esta vez prometen ser rápidos. Promesa que ni el general estadounidense Miller ni el Secretario de Estado británico para el desarrollo internacional, Simon Foster, creen. Pero, después de que Simon respaldara accidentalmente la acción militar en horario de máxima audiencia en la televisión, se gana, sin quererlo, muchos amigos en Washington D.C. y las críticas de sus compañeros.
Crítica de Cine.com por Leo Aquiba Senderovsky
Con In the loop vuelve la comedia británica más feroz, una película que tiene algunos aciertos, pero que, lamentablemente, se pierde en su estructura. Esta comedia arranca con un detalle absurdo que desata un conflicto mayúsculo. Un funcionario con muy pocas luces, inconscientemente, afirma en un medio que “la guerra es imprevisible”, y esta frase desata inmediatamente un torbellino en el gobierno británico. La película se centra en las internas que se originan dentro de las dependencias gubernamentales de Estados Unidos y el Reino Unido, siempre con el ojo puesto en los asesores, que deben intentar por todos los medios que el político para el que trabajan no diga nada que pueda perjudicarlo, a él mismo o al gobierno de turno.
La trama es un enredo incesante e imparable, que viaja permanentemente de un país al otro, y no se corre del ámbito de las oficinas de gobierno, mostrando una extensa y variada galería de personajes y reuniones, con políticos que se sienten más si encuentran lugar en alguna reunión importante, asesores de uno y otro lado, y algunos particularmente interesantes, como Malcolm Tucker, el asesor del Primer Ministro, que corre de un lado a otro y no deja de agredir a las personas con las que se cruza arrojando una colección de los improperios más originales que se hayan visto.
Por un lado, el centrarse en oficinas, la cámara en mano y el irónico humor británico hacen que la comparación con la exitosa serie televisiva The office esté servida en bandeja. Pero a diferencia de esta serie, In the loop intenta acercarse a los personajes (especialmente al joven protagonista, que se las ve negras en la carrera por detener la bola de nieve que desata aquella frase) pero nunca llega al nivel de intimidad de The office. Mientras que allí todas las situaciones se originaban en la convivencia de todos los que habitaban diariamente esa oficina, en In the loop todo el humor está depositado en las intrigas e internas gubernamentales, antes que en lo que puede originarse a partir del choque de los personajes en cuestión. Es como si The office se hubiese mezclado con Burn after reading, la comedia de los hermanos Coen. Difícil que el humor de las internas de oficina pueda mezclarse con las inexplicables intrigas conspirativas de aquella película. En In the loop intentan cruzarse ambas situaciones, pero la mezcla termina anulando el humor de la película. Si podemos reírnos, y mucho, con algunos diálogos y, especialmente, con los insultos de Tucker, el personaje que tan maravillosamente encarna un crispadísimo Peter Capaldi, difícilmente podamos hacerlo con la trama, que deposita todo su humor en el ingenio de las frases que pronuncian los personajes, pero que, pese a hacer que presenciemos reuniones secretas de miembros del gobierno, lo único que consigue es dejarnos afuera de ellas, mareándonos con la sumatoria de enredos que se presentan, que de tan llamativos terminan perdiendo toda gracia.
Finalmente nos identificamos con el imbécil de Simon Foster, que dice “la guerra es imprevisible” y después no parece entender nada de lo que se desata a su alrededor. Terminamos siendo víctimas de un guión que se pasa de listo al suponer que es gracioso no distinguir entre un problema de un muro lindante con una dependencia gubernamental y los serios conflictos diplomáticos que origina una frase poco feliz, cuando la misma película se empeña en hacernos creer que ambos problemas son sumamente irrelevantes.
Lo mejor de la película: Los originales insultos del personaje de Peter Capaldi, y un sólido elenco.
Lo peor de la película: Un guión que se cree ingenioso, pero que deposita todo su humor en los diálogos, y nos marea con su cadena de internas gubernamentales.
Dirección: Armando Iannucci.
País: Reino Unido.
Año: 2009.
Duración: 106 min.
Género: Comedia.
Elenco: Peter Capaldi (Malcolm Tucker), Tom Hollander (Simon Foster), James Gandolfini (general George Miller), Mimi Kennedy (Karen Clark), Paul Higgins (Jamie MacDonald), Gina Mckee (Judy), Steve Coogan (Paul), Chris Addison (Toby), Anna Chlumsky (Liza).
Guión: Armando Iannucci, Jesse Armstrong, Simon Blackwell y Tony Roche.
Producción: Kevin Loader y Adam Tandy.
Música: Adem Ilhan y Elysian Quartet.
Fotografía: Jamie Cairney.
Montaje: Anthony Boys y Billy Sneddon.
Diseño de producción: Cristina Casali.
Vestuario: Ros Little.
Distribuidora: Avalon Productions.
Estreno en Reino Unido: 17 Abril 2009.
Filmografía de Armando Iannucci
“The Thick of It” (11 episodios, 2005-2009)
In the Loop (2009)
“Time Trumpet” (6 episodios, 2006)
2004: The Stupid Version (2004) (TV)
“I’m Alan Partridge” (6 episodios, 2002)
“The Armando Iannucci Shows” (8 episodios, 2001)
Tube Tales (1999) (TV) (segmento “Mouth”)
Clinton: His Struggle with Dirt (1998) (TV)