Estreno en España: 2 Enero 2009
Puntuación:
Sinopsis
Copenhague, 1944. Mientras la población danesa desea que la guerra acabe cuanto antes, Bent Faurschou-Hviid, de 23 años y cuyo nombre de guerra es Flame (por su cabello rojo), y Jørgen Haagen Schmith, de 33 años y cuyo nombre de guerra es Citron (al parecer, en parte, porque había trabajado como mecánico en la fábrica de Citroën), ponen sus vidas en riesgo para luchar en un grupo de resistencia que combate clandestinamente contra los nazis y sus colaboradores daneses. Cuando su inmediato superior, Aksel Winther, les ordena una acción contra dos funcionarios de la organización de espionaje alemán Abwehr, los acontecimientos empiezan a descontrolarse. Flame mantiene una conversación con el inteligente coronel Gilbert y, por primera vez, Flame se cuestiona la orden que tienen que ejecutar… Parece que se ha producido un terrible error. Situaciones posteriores, llenas de sospechas, que envuelven incluso a su chica, la bella y misteriosa Ketty, llevan a Flame a descubrir los perfiles de una muy diferente y mucho más oculta agenda. ¿Tendrá que creer a Ketty o a Winther? ¿Y quién trabaja para quién? Llenos de dudas, Flame y Citron empiezan a sentir que están pisando arenas movedizas. Desesperados, desilusionados y con la sensación de haber sido traicionados por sus superiores, deciden confiar únicamente en ellos mismos y concentrar sus esfuerzos en acabar con el odiado y temido jefe de la Gestapo.
Crítica de Cine.com
por Leo Aquiba Senderovsky
Flame y Citron puede sorprender por ser una de las pocas películas danesas sobre el nazismo que conocemos. Sin embargo, este elemento no pasa a ser muy relevante ya que esta película se entronca fácilmente en la forma estética e ideológica de las producciones alemanas sobre este tema. Basta ver a dos excelentes actores alemanes, Christian Berkel y Hanns Zischler, a quienes hemos visto infinidad de veces en papeles de nazis o similares, volver a los mismos roles con la misma solvencia de siempre, y basta observar la misma cruza de ficción histórica con cine de entretenimiento, que caracterizó a los principales films alemanes recientes sobre el nazismo, como El hundimiento o Los falsificadores. De ellas, Flame y Citron no solo hereda su carácter de entretenimiento (aunque esta se destaca por sus escenas de acción, a diferencia de aquellas que no viraban hacia ese género) sino cierta dualidad ideológica en los personajes. Lo más evidente de este film es la forma en que se intenta evitar ciertos lugares comunes. De esa manera, no toda la resistencia es intachable, ni todos los agentes dobles son peligrosos (aunque por su trabajo no puedan evitar la traición), y algunos nazis pueden llegar a caer simpático. En el medio se encuentran los agentes que dan título a la película, dos compañeros que renuncian a todo (a sus familias, sus amores, una vida tranquila, y en última instancia, sus propias vidas) en pos de sus convicciones, haciendo todo lo posible para evitar la invasión nazi en Copenhague. Thure Lindhardt y Mads Mikkelsen entregan dos personajes que, pese a su evidente heroicidad, no pueden evitar exponer sus rasgos humanos, volviéndose completamente indefensos ante el abandono y los vaivenes de sus propias relaciones afectivas. Ambos se convierten en el vehículo principal de un policial con visos de western urbano, no tan reflexivo como otros films sobre la Segunda Guerra Mundial, y tan centrado en su carácter de entretenimiento como las películas alemanas más conocidas sobre el tema, aunque, a nivel historia, más semejante a El libro negro, aquella obra maestra del holandés Paul Verhoeven. Con una puesta extremadamente prolija y correcta, aunque por momentos algo más lenta y cansina, sin el pulso dramático del film holandés, Ole Christian Madsen muestra que Europa aun tiene mucha tela para cortar sobre el horror vivido hace más de medio siglo.
Lo mejor de la película: La forma en que intenta evitar caer en el discurso maniqueo, aportándole a cada personaje sus correspondientes matices, especialmente a la dupla protagónica.
Lo peor de la película: Un ritmo fluctuante y por momentos, carente del nervio característico de una puesta de este tipo.
Dirección: Ole Christian Madsen.
Países: Dinamarca y Alemania.
Año: 2008.
Duración: 130 min.
Género: Drama, thriller, bélico.
Elenco: Thure Lindhardt (Flame), Mads Mikkelsen (Citron), Stine Stengade (Ketty), Christian Berkel (Hoffmann), Hanns Zischler (Gilbert), Peter Mygind (Winther), Lars Mikkelsen (Ravnen), Flemming Enevold (Spex), Jesper Christensen (padre de Flame), Claus Riis Østergaard (Bananen).
Guión: Lars K. Andersen y Ole Christian Madsen.
Producción: Lars Bredo Rahbek.
Música: Karsten Fundal.
Fotografía: Jørgen Johansson.
Montaje: Søren B. Ebbe.
Diseño de producción: Jette Lehmann.
Vestuario: Manon Rasmussen.
Estreno en Dinamarca: 28 Marzo 2008.
Biofilmografía de Ole Christian Madsen
Ole Christian Madsen (Dinamarca, 1966) dirigió en 1999 su primer largometraje cinematográfico, “Pizza King”, que obtuvo el Premio Luna de Plata del Cinema Jove de Valencia. También han recibido premios internacionales sus siguientes títulos: “Prague”, “Nordkraft” y la película Dogma “Kira’s Reason. A Love Story”, galardonada con los premios Robert y Bodil como Mejor Película del Año. “Flame y Citron”, que tuvo a sus dos protagonistas -Thure Lindhardt y Mads Mikkelsen- nominados a los Premios del Cine Europeo, concursó en la última Seminci de Valladolid, y se estrena este viernes en España. Madsen coescribió el guión con Lars Andersen.
Filmografía
# Flammen & Citronen (2008)
# Prag (2006)
# Nordkraft (2005)
# “Rejseholdet” (4 episodios, 2002-2004)
# Kærlighedshistorie, En (2001) (no acreditado)
# “Edderkoppen” (2000) miniserie TV
# Pizza King (1999)
# “Taxa” (2 episodios, 1997)
# Sinans bryllup (1997)
# Stormfulde hjerter (1994) (TV)
# Lykkelige Jim (1993)