Título: El silencio de Lorna
Estreno en Argentina: 14 Mayo 2009
Sinopsis
Para convertirse en propietaria de un bar con su novio, Lorna, una joven albanesa que vive en Bélgica, se hace cómplice de un diabólico plan ideado por un mafioso llamado Fabio. Fabio ha orquestado un falso matrimonio entre ella y Claudy. El matrimonio permite a Lorna obtener la nacionalidad belga, para después poder casarse con un mafioso ruso que está dispuesto a pagar mucho dinero para adquirir la misma nacionalidad rápidamente. Sin embargo, para que el segundo matrimonio de Lorna sea posible, Fabio ha planeado matar a Claudy.
Crítica de Cine.com por Leo Aquiba Senderovsky
Este es el primer y único film de los Dardenne que vi a la fecha. Esta afirmación, que puede sonar a confesión (y en parte lo es), intenta despejar dudas sobre la naturaleza de esta crítica, que se ve imposibilitada de analizar al film en función de la prestigiosa trayectoria de los hermanos mimados de Cannes. Los hermanos belgas nos cuentan una historia dramática de seres que intentan sacar provecho a toda costa del otro. Lorna, una chica albanesa, planea poner un bar, y para ello debe obtener la nacionalidad belga. La mafia la llevará a casarse con un joven drogadicto para conseguir la nacionalidad que necesita y luego poder casarse con un mafioso ruso que también necesita la nacionalidad, pero esto no hace más que introducirla en una serie de situaciones lamentables, que harán que la joven se replantee su accionar cuasi criminal.
Todo muy interesante hasta aquí, y esta reseña da lugar a pensar en un relato frenético y hasta conmovedor, con una interesante construcción de personajes, principalmente del de Lorna. Sin embargo, nos encontramos con una película fría y monótona, que no llega a instalar cabalmente la transformación de Lorna. Sobre el final vemos cómo comienza a trastabillar su psiquis, a partir de haberse dado cuenta, demasiado tarde, de lo que produjo su participación en este enredo (y a partir de entender lo que sentía por Claudy, el adicto con el que se casa). Pero esta transformación se da casi de un momento para el otro, sin que podamos ver, incluso en la loable interpretación de Arta Dobroshi, los elementos que posibilitan ese replanteo ético en un personaje que, durante todo el desarrollo, se muestra frío y calculador al extremo. Fácil es preguntarse por la naturaleza de la transformación, cuando la película acompaña la frialdad de la protagonista, con un tono inamovible, que no colabora demasiado.
La cámara de los Dardenne, esa que ha sido elogiada muchas veces, se despega de la frialdad del planteo, acompañando permanentemente a Lorna, y observando su accionar y su creciente desequilibrio, sin emitir juicio alguno, pero sin ocultarnos su intimidad y sus flaquezas. Este es el aspecto más interesante de la puesta en escena, pero la imposibilidad de entender del todo la compleja naturaleza de Lorna, permite que salga a la luz el modo en el que los Dardenne se colocan frente al drama social. Esta lectura del contexto no debería prevalecer por sobre el relato central, y mientras que los Dardenne hacen el esfuerzo por darle al drama de Lorna el peso necesario, la soporífera monotonía de su evolución, aun con sus giros y su perpetuo movimiento, hace que el drama social, en tanto rótulo, se vuelva protagonista.
El silencio de Lorna es un film por demás interesante, con una trama con ribetes absurdos pero amparados en un tono realista que los vuelve convincentes. Sin embargo, algo me dice que no es la mejor puerta para entrar en el mundo de los Dardenne.
Lo mejor de la película: Arta Dobroshi, y su forma de interpretar un rol frío pero con diversas aristas.
Lo peor de la película: El trazo grueso de muchas situaciones, y que la frialdad y la monotonía no permiten una sólida y creíble transformación de la protagonista.
Título original: Le silence de Lorna.
Dirección y guión: Jean-Pierre Dardenne y Luc Dardenne.
Países: Bélgica, Francia e Italia.
Año: 2008.
Duración: 105 min.
Género: Drama.
Elenco: Arta Dobroshi (Lorna), Jérémie Renier (Claudy), Fabrizio Rongione (Fabio), Alban Ukaj (Sokol), Morgan Marinne (Spirou), Anton Yakovlev (Andreï), Grigori Manoukov (Kostia), Mireille Bailly (Monique), Laurent Caron (detective).
Producción: Jean-Pierre Dardenne, Luc Dardenne y Denis Freyd.
Fotografía: Alain Marcoen.
Montaje: Marie-Hélène Dozo.
Diseño de producción: Igor Gabriel.
Vestuario: Monic Parelle.
Distribuidora: Vértigo Films.
Estreno en Bélgica: 27 Agosto 2008.